El domingo 1 de diciembre se conmemoró el Día Mundial de la Lucha contra el Sida y el Día Panamericano de la Farmacia,  y desde el CFLP creemos que la celebración de ambas fechas es una buena oportunidad para reflexionar sobre este problema de salud pública que según las estadísticas más recientes de ONUSIDA, afecta a 37,9 millones de personas en todo el mundo y sobre nuestro rol como agentes de salud y como promotores de prevención de las Enfermedades de Transmisión Sexual (ETS).

En nuestro país, se estima que son 139 mil las personas que tienen el virus del VIH, aunque un 17% de ellas lo desconoce. Actualmente, en Argentina hay 59.000 personas que reciben tratamiento antirretroviral. De éstas, el 63% se atiende en el sistema público de salud, que cuenta con 771 centros de testeo con asesoramiento y 26 consultorios amigables para la diversidad sexual dependiente de la Dirección de Sida y Enfermedades de Transmisión Sexual (DSyETS).

Del análisis de los datos del último Boletín sobre el VIH, Sida y ETS del Ministerio de Salud de la Nación, difundidos esta semana, se conoció que en el país hay 5.800 contagios de VIH por año y el 98% de los nuevos casos fueron por mantener relaciones sexuales sin protección.

Según la Dirección de Sida, ETS, Hepatitis y TBC, la falta de uso de preservativo es una deuda pendiente en nuestro territorio. Si bien la epidemia de VIH se mantiene estable, en Argentina la sífilis está en aumento, registrando una tasa de 126 casos por cada 100 mil habitantes en la población entre 15 y 24 años, cuando lo esperable sería que fuera de 10 cada 100 mil habitantes. Esto es un alerta porque se trata de otra enfermedad que se transmite por las mismas vías pero mucho más fácil, entonces, si no se trabaja fuerte en el uso del preservativo, en unos años se puede volver a tener un aumento de los nuevos casos de VIH también.

En el Boletín 2019 del Ministerio de Salud se revela que por cada dos varones infectados hay una mujer, lo que se mantiene estable en relación con el año anterior. Otro dato del nuevo Boletín es que el 23% de los nuevos diagnósticos fueron tardíos, esto es, con personas que presentaban enfermedades asociadas. La prevalencia en la población en general es de 0,4%; pero si se piensa en poblaciones específicas el grupo más vulnerable son las mujeres trans, con una prevalencia del 34%; los hombres que tienen sexo con hombres, un 15%, y los usuarios de drogas inyectables, un 7%.

Rol de las Farmacias

En nuestro país desde el año 2007, no hubo una campaña nacional sobre estas temáticas que tuviera repercusión e inserción para generar un verdadero proceso de prevención. Además, la falta de aplicación de la Ley de Educación Sexual Integral (ESI) también hace que se pierdan oportunidades de formación e información a edades tempranas.

En ese sentido y teniendo en cuenta que las farmacias comunitarias son en todo el mundo los “puntos de salud” más numerosos y de más fácil acceso para el público en general, que siguen siendo el lugar donde principalmente los jóvenes adquieren sus métodos de anticoncepción y que por nuestro entrenamiento en cuestiones de salud pública, los farmacéuticos estamos en una posición determinante para participar en iniciativas de educación para la salud.

Específicamente para la prevención del VIH, algunas indicaciones básicas que el farmacéutico puede ofrecer son:

*Mantener relaciones sexuales de forma segura.

*Someterse a las pruebas de detección del VIH.

*Evitar las drogas inyectadas o, en caso de hacerlo, usar agujas estériles.

*Asegurarse de que todo producto sanguíneo al que deba accederse ha pasado las pruebas del VIH.

*En caso de contagio, empezar el tratamiento cuanto antes para prevenir la propagación del mismo a personas cercanas.

Como ya hemos manifestado en oportunidades anteriores, no debemos olvidar que la información también es salud.